En los últimos tiempos Pablo Iglesias se ha convertido en el personaje por excelencia. Tras su éxito en las elecciones europeas del pasado 25 de mayo, ante el terremoto social que ha provocado, no son pocos los que se han lanzado a la tarea de enturbiar su figura, por vaya usted a saber qué intereses individuales o colectivos.
Ante tal cantidad de calificativos dedicados a este personaje público, he decidido iniciar una serie de artículos para:
1). Hacer las delicias de los detractores, que tomarán nota de nuevas informaciones que publicar desde este blog, fuente fidedigna de información «veraz» (veraz la que puedo liar…).
2). Hacer que los incondicionales de este profesor universitario metido en política sepan en «realidad» quién es.
3). Hacer que los que vemos los toros desde la barrera, sin inclinarnos hacia un lado o hacia el otro, pero que nos parece bien que otro peón (¿o quizá alfil, torre, …?) entre en el tablero de juego, para ver qué tal se da un ajedrez a tres, echemos unas risas ante lo que podemos llegar a ver y escuchar en los medios de comunicación.
Desde este humilde blog iniciamos esta sección (¿Qué pinta un espacio dedicado a Pablo Iglesias en un blog de música? Eso mismo digo yo…), cual programa «Lluvia de estrellas», con ánimo de reirnos un poco, que la cosa está muy malita oiga, y ya me duelen los ojos de llorar tantas penas.
Que ustedes se lo tomen bien.
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| Nuestro protagonista. Ahora vais a conocer quién es «realmente» Pablo Iglesias… |
Nota: Como en la mayoría de blogs del mundo, este espacio admite comentarios, bajo moderación de un servidor. No se publicarán comentarios de mal gusto ni basados en insultos. Este blog es como el «Scattergories», y como es mío yo pongo mis reglas.